La real dimensión de las cosas

Hace mucho tiempo... cuando todavía estaba en el colegio... llegaron cerca de mi casa los típicos juegos mecánicos... y entre todas las cosa ke habían... venía el nunca bien ponderado tagadá... ke a mi cuando lo vi en ese tiempo me pareció enorme...

El miércoles... un amigo me llamó por teléfono y me dijo ke los mismos juegos ke mencioné, habían llegado cerca de su casa... la tentación por ir a verlos fue inmediata... Tomé una micro y me fui a verlos. Grande fue mi sorpresa, cuando el tagadá ke encontre era mucho más pekeño de lo ke lo recordaba... Y me sentí rara...

Me dio por pensar en cuántas veces yo he sobredimensionado (ke palabra más complicada) no solo las cosas, sino que tambien los hechos, las personas y hasta mis sentimientos... Y descubrí ke cada vez ke puse más esperanzas en algo, alguien o lo que sentía... salí completamente desfraudada, frustrada y dolida...

Y pude ver como una verdadera pauta, cómo la historia en mi se había repetido. Y no solo con las cosas (siempre creí ke eran más grandes de lo ke realmente eran) sino con las personas, los hechos y los sentimientos.

Y pude ver tambien, cómo cada vez ke tenía menos esperanzas en las cosas... ke las veía como realmente eran... las experiencias fueron cada vez mejores... Cuando dejé de cambiarme para poder estar a la altura de los ke se suponía tenían ke ser mis amigos, encontré a los mejores amigos del mundo... no son muchos, pero valen por un millón (toma Roberto Carlos)...

Cuando dejé de poner mis esperanzas en las cosas... descubrí ke nunca nada me ha faltado... ke tengo una cama donde dormir... ke tengo más ropa de la ke puedo ponerme... ke tengo muchas cosas por las cuales ser feliz (y eso ke me refiero solo a lo material)...

Cuando dejé de buscar a mi principe azul, el hombre perfecto... apareció alguien ke tiene todo lo ke me hace feliz, ke no es perfecto, pero ke desde sus imperfecciones acepta las mias... y así me ama... y asi lo amo yo...

Cuando descubrí la real dimensión de las cosas... cuando pude mirar mi historia hacia atrás... en un lento y doloroso racconto... me dí cuenta ke por primera vez estoy siendo honesta conmigo y ke por eso he logrado deshacerme de los errores del pasado, errores tantas veces cometidos... para poder pararme en mis pies, respirar profundo y seguir...

Cuando le dí a las cosas las reales dimensiones ke poseen... me di cuenta ke por primera vez en mi vida amo de verdad... y ke lo ke sentí antes y ke me hizo llorar por varios años... no era nada más y nada menos... ke una sobredimensión de algo ke nunca tuvo ningún futuro.